Correspondiente a su peso económico, poblacional y electoral, la provincia Santo Domingo se llevó el pastel más grande en descentralización de la inversión pública durante los cinco años de gobierno de Luis Abinader: 315 obras de alto impacto concluidas o en desarrollo.
La más emblemática es la Línea 2C del Metro hasta Los Alcarrizos, con una inversión de RD$29,850 millones y 7.3 kilómetros de extensión, que beneficiará a más de un millón de personas. Se suma el Teleférico de Los Alcarrizos, ya en servicio, con RD$6,698 millones, y la ampliación de la avenida Ecológica, con RD$6,322 millones.
Hasta agosto se habían asfaltado 1,093 kilómetros de calles y avenidas, con una inversión de RD$10,820 millones. En Santo Domingo Este se inauguró la Ciudad Judicial, con 50,000 m² y RD$4,486 millones; en construcción está el Palacio de Justicia de Santo Domingo Oeste, por RD$1,852 millones. En transporte masivo se programa otro teleférico entre el kilómetro 9 de la Duarte y el 12 de Haina, por RD$6,320 millones.
Entre otras obras figuran la Circunvalación de Los Alcarrizos, el elevado de San Andrés en Boca Chica (US$51 millones), la ampliación de avenidas clave en SDE y SDO, la extensión de la UASD en Santo Domingo Este (RD$1,615 millones) y el saneamiento de 45.5 kms de cañadas, con 925 viviendas y áreas de recreación, por RD$11,000 millones.
El sector salud recibió el Hospital Mario Tolentino Dipp (SDN, RD$2,800 millones), la remodelación del Marcelino Vélez (RD$765 millones) y un nuevo hospital municipal en Boca Chica (RD$362 millones).
La vivienda ha sido otro eje: en Ciudad Juan Bosch se han entregado más de 10,900 nuevas unidades; además, proyectos como Mi Vivienda San Luis, Ciudad Modelo y Hato Nuevo suman miles de apartamentos y más de RD$15,000 millones en inversión.
En total, Santo Domingo se consolidó como epicentro de la obra pública del actual gobierno.