A pesar de las protestas y la trágica pérdida de vidas humanas en la lucha por la conservación del río Tireo, la extracción ilegal de materiales sigue sin control en la zona. Residentes denuncian que, a plena luz del día y con total impunidad, se continúan llevando arena y otros recursos del afluente, generando una grave crisis ambiental.
Líderes comunitarios expresan su frustración ante la inacción de las autoridades y el desinterés por frenar esta problemática. “El temor de Francisco se ha quedado en el olvido. Él murió, pero el río sigue muriendo con cada extracción”, señala un residente, refiriéndose a una víctima de las protestas pasadas.
La comunidad exige medidas urgentes por parte del Ministerio de Medio Ambiente para detener el deterioro del río Tireo, un recurso vital para la zona. Mientras tanto, los ciudadanos temen que la falta de acciones concretas lleve a consecuencias irreversibles para el ecosistema local y la seguridad de quienes dependen del río.
