La Operación Panthera 7 desmanteló una red criminal en el puerto Multimodal Caucedo, donde se intentaba movilizar 9.8 toneladas de cocaína. Según el Ministerio Público (MP) y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la acción fue posible gracias a inteligencia previa y alertas generadas en el puerto.
La DNCD, bajo la dirección del vicealmirante José Manuel Cabrera Ulloa, desplegó recursos adicionales tras recibir informes sobre un posible intento de tráfico de drogas durante el pico comercial de diciembre. La administración del puerto también reportó movimientos inusuales, lo que llevó a la incautación de los contenedores implicados.
El operativo comenzó el 5 de diciembre de 2024, cuando el contenedor identificado con el número FFAU4542281 fue detectado a las 5:40 p.m. a bordo de un camión Mack CXU613. Este contenedor evadió la inspección de rayos X y la verificación manual en el control de acceso P-0, lo que evidenció complicidad interna en el puerto, incluyendo a inspectores y selladores. Más tarde, a las 6:05 p.m., el mismo contenedor pasó por el control P-1 como un retorno vacío, aunque en su interior llevaba los paquetes de droga.
A las 8:21 p.m., el contenedor fue encontrado en el patio de cargas del puerto, junto a otro contenedor refrigerado, HLBU9354083, procedente de Guatemala con bananos destinados a Bélgica. La operación criminal buscaba transferir la droga entre ambos contenedores, pero la intervención oportuna de las autoridades impidió el proceso, dejando un total de 9,587 paquetes, equivalentes a 9,889 kilogramos de cocaína.
Para facilitar la transferencia de la droga, parte de la carga de bananos fue retirada del contenedor refrigerado. Cuatro hombres armados y encapuchados secuestraron a un camionero en un intento desesperado por escapar, pero el puerto estaba cerrado por las fuerzas de seguridad, obligándolos a huir por una verja perimetral.
El camión utilizado estaba registrado a nombre de un testaferro y equipado con un GPS, lo que permitió rastrear su ruta hasta una propiedad cercana al puerto. Esta propiedad, vinculada a un imputado clave y presidente de la empresa GWG TRANSPORT, fue identificada como el punto donde se cargó la droga.
El Ministerio Público incautó vehículos, armas, dinero y documentos relacionados con la operación. Además, continúan procesando evidencias digitales y forenses para establecer más vínculos.
Las autoridades han asegurado que todas las diligencias y pericias forenses cumplen estrictamente con los procedimientos legales, y se están compartiendo los hallazgos con otros países de interés. Se solicitarán medidas de coerción contra los imputados arrestados.