El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), junto a la Policía Nacional, está llevando a cabo el desalojo y reubicación de más de 130 familias que vivían en condiciones precarias bajo el Puente Francisco del Rosario Sánchez (La 17), como medida esencial dentro del plan de remozamiento y reparación integral de la estructura
⚠️ Situación crítica: un asentamiento en riesgo
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Las viviendas informales, levantadas con madera y zinc, carecían de servicios básicos (agua, energía, saneamiento), y estaban en una zona no habilitada para residir
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Esta ocupación desordenada comprometía tanto la seguridad de los moradores como la integridad del puente, vital para el tránsito entre Santo Domingo Este y el Distrito Nacional
✅ Avances en el operativo y compensaciones
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Hasta ahora se han identificado 132 expedientes, y 29 hogares han recibido reubicación con apoyo económico personalizado
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Se han demolido al menos 25 estructuras, permitiendo el acceso a las brigadas técnicas para iniciar intervenciones en la losa, juntas de dilatación y limpieza de la infraestructura
🛠️ El ambicioso plan de renovación
El plan de reconstrucción contempla:
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Reparación estructural profunda de vigas, losas y juntas.
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Renovación estética, con pintura y mejoras visuales.
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Estrategias para garantizar la durabilidad del puente, que data de 1974, y proteger a miles de usuarios diarios
🌍 ¿Y la gente que vivía allí?
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Familias que llevaban décadas en ese lugar denuncian que las compensaciones económicas no cubren ni una parte del valor real de sus viviendas; muchas vivieron allí desde los años 80El Demócrata.
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Líderes comunitarios advierten que persiste el temor de un colapso debido al deterioro, con pedazos de concreto y metal cayendo constantemente
🗣️ Voces desde abajo
Carlos Hernández, residente por 25 años, señaló:
“Estamos esperando… si van a sacarnos de aquí para continuar”, y lamentó la falta de alternativas claras de vivienda
Yesenia Ventura, que vendía café bajo el puente, destacó que pagaba 8 000 RD$ mensuales por un hogar sin agua potable ni seguridad
📌 Conclusión
El desalojo representa un avance necesario en seguridad y recuperación urbana, pero las víctimas sociales exigen medidas integrales. El reto está en equilibrar la restauración de infraestructura con un plan de reubicación digna, que considere historia, necesidades y derechos de quienes han sido parte de ese espacio desde hace décadas.