Tras heredar una fortuna, superar una larga lucha contra las adicciones y reinventarse, el coleccionista argentino Lucas Ferrer inauguró un museo singular que reúne piezas de alto valor sentimental e histórico: desde vestidos originales de la princesa Diana hasta camisetas firmadas de Diego Maradona y modelos clásicos de automóviles de leyenda.
El espacio se erige como un homenaje a íconos del deporte, la moda y la cultura pop, y busca generar conciencia sobre la importancia de la rehabilitación personal y la reinvención. “Cada objeto tiene una historia, y cada historia puede inspirar un cambio”, confesó Ferrer durante la apertura.
Las piezas más llamativas incluyen el vestido azul de noche que Lady Di usó en 1997, una camiseta autografiada por Maradona con la que jugó en el Mundial de 1986 y un modelo Ford GT40 que ganó las 24 Horas de Le Mans en 1968. Además, la colección cuenta con objetos poco comunes como una edición limitada de zapatillas Jordan, portadas originales de la revista Vogue de los años 70 y cámaras usadas por cineastas de Hollywood.
El museo también ofrece un centro educativo donde se imparten talleres sobre recuperación de adicciones y gestión de colecciones patrimoniales, vinculando la experiencia de Ferrer con un mensaje de esperanza y transformación.
