En medio de la grave crisis económica que enfrenta Cuba, el gobierno ha tomado una decisión polémica: la venta de gasolina de alto octanaje exclusivamente en dólares. Esta medida ha generado indignación entre los ciudadanos, quienes ven limitada su capacidad para adquirir combustible en moneda nacional.
La escasez de combustible ha afectado el transporte público y privado, agravando la crisis en la isla. Expertos señalan que esta estrategia busca captar divisas extranjeras para enfrentar la falta de liquidez del régimen, pero a costa del acceso de la población a servicios básicos.

La crisis en Cuba se agrava con nuevas restricciones económicas. La venta exclusiva de gasolina premium en dólares ha generado un fuerte rechazo, mientras los cubanos enfrentan una escasez sin precedentes de productos básicos y servicios esenciales.
Esta medida refleja la necesidad del régimen de obtener divisas extranjeras, pero impacta directamente a la población que depende del peso cubano. ¿Cómo afectará esto a la movilidad en la isla y qué consecuencias tendrá para la economía cubana?